El apoyo parental es fundamental para los adolescentes con TEA que quieren aprender a conducir

Los adolescentes con autismo necesitan el apoyo de sus padres o tutores para priorizar la independencia para que estén preparados para aprender a conducir, de acuerdo con un estudio de instructores de manejo especializados que han trabajado específicamente con jóvenes conductores que tienen autismo. Estos hallazgos fueron recopilados por investigadores del Children’s Hospital of Philadelphia (CHOP) y recientemente publicados en la revista Autism in Adulthood.

Los instructores de manejo también enfatizaron la necesidad de desarrollar y refinar las mejores prácticas para guiar la evaluación y la entrega de enseñanza altamente individualizada para adolescentes con autismo.

El estudio fue realizado por un equipo multidisciplinario de investigadores de CHOP’s Center for Injury Research and Prevention, Center for Autism Research y Division of Emergency Medicine, así como  la Escuela de Enfermería de la Universidad de Pensilvania y el Instituto de Transporte de Virginia Tech (VTTI) como parte de un estudio de cinco años, orientado a comprender los problemas de movilidad para adolescentes con autismo financiado por el Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano Eunice Kennedy Shriver (NICHD) en los Institutos Nacionales de la Salud (NIH). Este es el primer artículo publicado como parte del estudio.

“A través de nuestras entrevistas con instructores especializados en conducción, aprendimos que creen que los padres son un elemento fundamental en la preparación y conducción de manera independiente”, dijo Rachel K. Myers, PhD, autora principal del estudio y científica del Centro de Investigación y Prevención de Lesiones, en el Hospital Infantil de Filadelfia (CHOP).

“Los instructores recomiendan que los padres ayuden a sus hijos a desarrollar destrezas para la vida de manera independiente, incluyendo el uso de medios de transporte alternativos, tales como el ciclismo o el transporte público, y que practiquen habilidades de manejo previo, como la exploración, antes de tomar clases de manejo en carretera”.

Los instructores de manejo son un recurso importante para las familias, especialmente para aquellas que tienen adolescentes con autismo  y que aprenden a conducir. Sin embargo, debido a que no se sabe mucho acerca de la experiencia específica de enseñar a los adolescentes autistas a conducir, esto limita la capacidad de brindarles a los adolescentes y las familias la orientación adecuada para prepararse para el proceso de aprendizaje para conducir.

Para ayudar a cerrar esta brecha, los investigadores realizaron entrevistas en profundidad con instructores de conducción especializados que tenían experiencia en el trabajo con adolescentes con autismo y adultos jóvenes. Este es el primer estudio que examina el proceso y la experiencia de los instructores de manejo que brindan capacitación detrás del volante específicamente para esta población.

El estudio reveló un conjunto de temas comunes que, enfatizaban la importancia de los padres de adolescentes con autismo en la preparación para el proceso de aprendizaje para conducir, con instructores de conducción, que ven a los padres como agentes esenciales para apoyar sus esfuerzos en la enseñanza de habilidades de conducción y promover la independencia. Los instructores participantes dijeron que los padres pueden apoyar y priorizar la independencia alentando a sus hijos adolescentes con autismo a desarrollar habilidades para la vida, tales como cortar el césped, cocinar y tomar el transporte público, antes de aprender a conducir.

A pesar de que los instructores de manejo identificaron la necesidad de desarrollar y refinar las mejores prácticas para la evaluación y enseñanza, reconocieron que los enfoques específicos deben adaptarse para satisfacer las necesidades únicas de cada conductor adolescente con autismo, lo que refleja el espectro que afecta a cada adolescente de manera diferente.

Otras sugerencias de los instructores involucrados en este estudio fueron incluir el uso de servicios de rehabilitación vocacional a nivel estatal para proporcionar un apoyo financiero para la enseñanza, identificar y promover las habilidades de vida antes de conducir, enseñanza de conducción supervisada por los padres, en colaboración de enseñanza de conducción profesional y sus adaptaciones  para abordar las necesidades particulares de los conductores aprendices.

“Lo que estos instructores especializados en conducción nos dijeron acerca de la disociación entre la conducción y otras habilidades para la vida fue sorprendente“, dijo Benjamin E. Yerys, PhD, autor del estudio y psicólogo del Centro de Investigación del Autismo en el Hospital Infantil de Filadelfia. “Es posible que algunos padres no dejen que sus hijos adolescentes con autismo usen un horno de cocina, pero se preguntan si sus hijos están listos para conducir. Ya sea que sus hijos decidan conducir, los padres deben fomentar una mayor independencia alentándolos a moverse por su cuenta, conducir o tomar otros medios de transporte es esencial para continuar su educación, trabajar y mantenerse en contacto con amigos y familiares “.

La obtención de una licencia de conducir es un acontecimiento importante en la transición a la edad adulta. Este acontecimiento aumenta la independencia y la movilidad de los adolescentes, lo que potencialmente puede llevar a cabo un mejor acceso a las oportunidades de participación educativa, laboral, social y de participación comunitaria. De acuerdo con investigaciones anteriores de CHOP, casi un tercio de los adolescentes con autismo obtienen una licencia de conducir cuando tienen 21 años, lo que puede mejorar su capacidad de transición como adultos independientes.

Los recursos para que las familias ayuden a sus hijos adolescentes para la transición de TEA a la edad adulta están disponibles en The Center for Autism Research en CHOP y TeenDriverSource.org

Este trabajo fue apoyado por el Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano Eunice Kennedy Shriver en los premios Institutos Nacionales de Salud R01HD079398 y R01HD096221.


©Traducción Pamela Palomeque
Este artículo no puede ser reproducido ni copiado sin autorización expresa.


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