El poder mediador de los adultos en el lenguaje infantil

La neuropsicología es una disciplina que se encarga de estudiar las funciones psicológicas del ser humano en un medio social e histórico en el que éste, no se puede aislar del mundo para poder aprender y desarrollar todas sus habilidades, aptitudes, intereses, emociones y necesidades.

Ahora bien, la psicología, la lingüística y la pedagogía son disciplinas que juegan un papel fundamental en la maduración de las personas pero, el papel que cada una hace es de forma integral.

En el área de la psicología infantil, Leontiev, realizó sus primeras investigaciones y dio continuación a las ideas que Vigostsky expresó en un principio, con el objetivo concreto de la elaborar la teoría histórico-cultural del desarrollo. Mediante sus investigaciones intentó aclarar algunas características de los mecanismos internos de la mediatización entendida como “un andamiaje o bien un apoyo” es decir, un medio para que las personas con desarrollo normal o con alguna afectación en este, tengan la oportunidad de desarrollar sus aptitudes a través de apoyos externos y; el concepto psicológico del proceso de formación de las funciones psíquicas en el ser humano.

En la segunda etapa de su investigación Leontiev dirigió sus estudios hacia la actividad del hombre de ahí que, dijo que el desarrollo de la asimilación proviene de “la experiencia social” y esta solo se da, dentro de la actividad conjunta del niño con el adulto si bien, los padres, educadores, cuidadores, abuelos, tíos, entre otros; le aportan enseñanzas al infante, de lo que existe a su alrededor a partir de conductas aprendidas, son pues, el eje que influye directamente en su proceso de maduración. Por ejemplo cuando la madre tiene los primeros contactos con su bebé, al hablarle, le está aportando su primer acercamiento al habla.

Por su parte, Zaporozhets se interesó desde su juventud por el problema de los movimientos y de las acciones motoras. Pues consideraba a la percepción como un proceso complejo que posee su propio motivo, como una forma de actividad que incluye procesos elementales, sensoriales, como procesos más complejos, perceptivos y acciones. Sin embargo, el problema de los movimientos voluntarios ha sido fundamental durante siglos, tanto en la filosofía como en la psicología, por lo que Zaprozhets y sus colaboradores, observaron que los movimientos involuntarios, vegetativos, se transforman en voluntarios, dirigidos, y que durante este proceso la actividad orientadora-investigativa desempeña un papel fundamental.

Y es así como concluyen que los movimientos adquieren un carácter voluntario y las “sensaciones de los movimientos” necesariamente adoptan un carácter de señal. Por ejemplo, al ejercitar los músculos orofaciales mediante el uso de apoyos físicos y verbales que realiza el terapeuta, la madre, el padre, los abuelos, los tíos y demás involucrados con una persona con parálisis cerebral, con autismo o bien que presente alguna disminución o alteración de su lenguaje y si este se da manera intermitente al tonificar su aparato fonoarticulador  se rehabilitan o bien se habilitan sus movimientos y comienzan a tornarse en voluntarios mediante esa mediatización en la que intervienen todos los involucrados en el tema. Sin embargo esto no solo se realiza dentro del cubículo de la terapia, sino que se trabaja en un programa integral que requiere de contextos naturales y que incide en el área social, cognitiva, motora, comunicativa, emocional. Puesto que, es imposible que el aprendizaje se adquiera de forma aislada, siempre necesitará de otros para retroalimentarse en su ser, saber y hacer. El ser humano por naturaleza es un ser social, que necesita de otros para poder desarrollar sus habilidades, saberes, inquietudes, necesidades, intereses, aptitudes, actitudes, emociones…

AUTORA:

Mtra. Alondra Zúñiga Reali

Fuente bibliográfica:
Educación Neuropsicológica Infantil, Métodos prácticos de solución de problemas de aprendizaje en la lectura, Yulia
Solovieva, Luis Quintanar, editorial Trillas, reimpresión 2013 Experiencia de trabajo con personas con parálisis cerebral, autismo, problemas de lenguaje y familias.


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1 comentario en «El poder mediador de los adultos en el lenguaje infantil»

  1. Seria de Utilidad que dieran algún ejemplo o mejor aun redactaran como pudiéramos ayudar a motivar o corregir la carencia y alteración del lenguaje, quien lo lleva con terapeutas y quien no, a veces son muy incompetentes las terapias pero quien no sabemos tampoco tenemos idea o noción de como ayudarles.

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